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El pensionado de Fernando Parilli Tota, Rey de Copas se queda esta tarde con la edición 18 del Clásico Cañonero (GI) para potros de dos años, en la quinta de las válidas del 5y6 nacional, y cierra el año de manera invicto luego de dos presentaciones en su naciente temporada pistera.

Desde el principio de la carrera, Rey de Copas tomó la delantera en una lucha con el pupilo de Rafael Cartolano, Gloriossus, que tuvo la monta de Larry Mejías. Sería el pensionado de Cartolano el cual tomaría la delantera en los primeros 400 metros, donde dejaría un tiempo de 22.3 para tomar la recta de La Panamericana, y buscar la escapada para la victoria.

Pero Rey de Copas no lo dejaría irse tan fácil y comenzaría un remate en los 300 metros finales, para alcanzarlo en los 150 restantes y sacar tres cuerpos de ventaja y mantener el invicto en su joven campaña como purasangre de carreras en el óvalo de Coche.

El producto de Gala Award en Paso de Luna por Striding Out, nacido y criado en el Haras Agua Miel, del Stud Z Affair, tuvo la monta del jinete profesional Francisco Quevedo, fue escoltado por el potro Gloriossus, Deep Attack, de Fernando Parilli Araujo, y Jean Carlos Rodríguez en el sillín, luego, Forty Time con Jaime Lugo y Ramón García Mosquera y cerró la pizarra Parrillero de José Luis Balzán y la monta de Maikel Rodríguez.